Geógrafo licenciado por la Universidad de Barcelona y máster en dirección de personal y psicología industrial por la EAE. Inversionista y aficionado al alpinismo. Nacido en Girona en 1961 y viviendo en Campo (Huesca) procurando desarrollar los conceptos de “slow life” y ecología en un medio rural. Soltero y con un hijo: Néstor nacido en el año 1996. Ácrata y agnóstico. Apasionado por la belleza y la libertad. Trabajando, desde el año 1988, como profesional liberal en asesoramiento financiero, proyectos de topografía, geotecnia, urbanismo, catastro, planificación del territorio y asesoramiento weblog. Desde el año 2013 emprendiendo negocios relacionados con las criptomonedas. Conocedor del castellano, catalán, inglés y francés.
Si escribe, sin haber subido, no puede hacer nada. Si sube sin escribir, no deja nada.
Si sube y escribe con sequedad no deja más que un documento que puede ser, es verdad, de gran interés.
Si sube, escribe y siente, si en una palabra es el pintor de una naturaleza especial, el pintor de la montaña, deja un libro verdadero, admirable.
Henri Beraldi
¡Lo siento! La descarga según tengas tu conexión te va a durar tiempo o bastante tiempo en función de tu proveedor de Internet pero creo que te va a merecer la pena la posible espera. Una vez hayas hecho el click te da tiempo a ir a buscar tu refresco preferido de marca internacionalmente conocida a tu nevera ;-).
El montañero es el poeta-atleta. Sabe degustar las escenas pintorescas y pastoriles del valle; le gusta retardarse bordeando lagos tranquilos y azules o siguiendo los caminos del bosque. Disfruta largamente de las alturas y modera el paso para ver en el horizonte las noches o las tempestades; acampa bajo una roca con el claro de la luna. Sabe también afrontar las grietas y las paredes amenazadoras, saboreando la sensación intensa de peligro. Lo que le habla al corazón es menos el deporte que la montaña.
Henri Brulle
A más de un@ le puede sorprender que se incluya comentarios de libros de autoayuda en un blog muy dedicado a la montaña. Parece que son dos cosas que no tengan casi nada que ver. Pero no. Sí tienen bastante relación. Pienso que practicar montañismo de forma habitual proporciona una alta confianza en uno mismo y un aumento significativo de la autoestima. Es algo que parece como irreal por inconexo. Pensemos que el montañero se propone pequeñas metas: subir este fin de semana a tal cumbre. Bien. El hecho continuado de conseguir objetivos o aprender de los fracasos, que los hay, es la mejor forma para ir formando el carácter. Y, como consecuencia de ello, mejoraremos en el día a día. A ello, hay que añadirle que en la práctica de cualquier deporte se oxigena el cuerpo y la mente. O se crea adrenalina de forma natural que nos va a ayudar a enfrentarnos con los problemas con una visión más optimista. Por útltimo, y no menos importante, el estar rodeados de paisajes espectaculares, ambientes naturales o estar largas horas con un ritmo que facilite que se piense y reflexione acaba por afectar a cualquiera y que se reconozca que hay un antes y un después de cada experiencia alpina.
La ayuda que proporciona la autoayuda te puede ayudar.