Autor: Miquel J. Pavón Besalú
La despoblación en el medio rural
El medio rural español se está despoblando de una manera bastante rápida. En el año 1900, el 48 por ciento de la población vivía en núcleos con menos de 2000 habitantes. En el año 1991, este porcentaje había descendido hasta el 25 por ciento. En los últimos 50 años el volumen de la población rural española ha bajado un 28 por ciento. Otros 40 años al mismo ritmo y el campo se quedará vacío. Hay que posicionar este éxodo rural en el cuadro de un proceso de transformación social. Es decir, un cambio del papel que desempeña el medio rural. Es un proceso que ocurre desde la segunda Guerra Mundial hasta nuestros días en toda Europa. La agricultura se hace menos y menos importante como sector generador de empleo. Y es que en este sector económico la actividad ha disminuido radicalmente. Y, en especial, en España ya que en los últimos 25 años el cambio ha sido aceleradísimo. En el año 1976, el 22 por ciento de la población activa trabajaba en la agricultura, frente al 6 por ciento en el año 2003. Ya desde los años treinta del siglo XX se manifiesta en España un movimiento migratorio desde el campo hacia la ciudad, debido a la falta de posibiidades de empleo en el sector primario. Estos flujos migratorios fueron reforzados por la revolución industrial generada desde las ciudades. Durante los años sesenta estos flujos se intensificaron. Han resultado ser un verdadero éxodo rural. En Aragón, estos procesos se han manifestado de una forma muy clara. En esta región del noreste de España existe un gran contraste entre el medio urbano y el medio rural en términos de densidad de población. La transición de la ciudad al campo no es una transición gradual, sino una transición brusca. La capital, Zaragoza, tiene una densidad de población muy alta. En las áreas limítrofes la densidad baja hasta valores poco elevados (menos de un habitante por kilómetro cuadrado). Este contraste tiene su origen principalmente en la migración hacia las áreas urbanas durante el siglo XX. Esta migración ha sido una migración selectiva. La población rural ha envejecido y la supervivencia de los pueblos se encuentra en peligro. Varias personas etiquetan el éxodo del medio rural como un importante problema, para lo que es imprescindible encontrar una solución. Parece que hay proyectos de inmigración que están puestos en marcha para dar un nuevo impulso a los pueblos del medio rural. Aunque estos proyectos tengan como objetivo el de mejorar la situación actual la verdad es que no se notan sus resultados por ningún lado. Parece como que de facto se acepta la despoblación del medio rural como un hecho irremediable. Lo único que se pretende, en realidad, es procurar sacar el máximo provecho económico. Dentro de esta pretensión, la agricultura y la ganadería continúan teniendo un papel importante en tanto en cuanto sirvan para mantener un paisaje bucólico para los ojos de los turistas. Es por esto que el turismo rural desempeña, cada vez más, un papel complementario en la economía rural. Proyectos de la Unión Europea pretenden desempeñar un papel clave en este proceso. Será bastante improbable que el turismo rural pueda generar el mismo nivel de empleo como tenía la agricultura en el periodo antes del éxodo rural.
La pregunta del millón es: ¿Nos interesa aborregar a toda la población en las ciudades y dejar el medio rural despoblado?.
Petición: No al cierre del aula de ESO del CEIP Cerbin de la Villa de Campo (Huesca).
El secreto de la felicidad
Hace muchísimos años vivía en la India un sabio de quien se decía que guardaba en un cofre encantado, un gran secreto que lo hacía ser un triunfador en todos los aspectos de su vida y que por eso … se consideraba el hombre más feliz del mundo.
Muchos reyes envidiosos, le ofrecían poder y dinero. Hasta intentaron robarlo para obtener el cofre, pero todo era en vano. Mientras más lo intentaban, más infelices eran, pues la envidia no los dejaba vivir. Así pasaban los años y el sabio era cada día más feliz.
Un día llegó ante él un niño y le dijo:
“Señor, al igual que tú, también quiero ser inmensamente feliz” ¿Por qué no me enseñas que debo hacer para conseguir la felicidad? El sabio, al ver la sencillez y la pureza del niño, le dijo: “A ti te enseñaré el secreto para ser feliz”. Ven conmigo y presta mucha atención. En realidad son dos cofres en donde guardo el secreto para ser feliz y estos son mi mente y mi corazón. El gran secreto no es más que una serie de pasos que debes seguir a lo largo de la vida.
El primer paso, es saber que existe la presencia de Dios en todas las cosas de la vida y, por lo tanto, debes amarlo y darle gracias por todo lo que tienes.
El segundo paso, es que debes quererte a ti mismo y todos los días al levantarte y al acostarte, debes afirmar: yo soy importante, yo soy capaz, yo valgo, soy inteligente, soy cariñoso, espero mucho de mí, no hay obstáculo que no pueda vencer. Esto se llama autoestima alta.
El tercer paso, es que debes poner en práctica todo lo que dices que eres, es decir, si piensas que eres inteligente, actúa inteligentemente; si piensas que eres capaz, haz lo que te propones; si piensas que no hay obstáculos que no puedas vencer, entonces proponte metas en tu vida y lucha por ellas hasta lograrlas. Este paso se llama motivación.
El cuarto paso es que no debes envidiar a nadie por lo que tiene o por lo que es, ellos alcanzaron su meta, logra tú las tuyas.
El quinto paso, es que no debes albergar en tu corazón rencor hacia nadie; ese sentimiento no te dejará ser feliz, deja que las leyes de Dios hagan justicia y tú perdona y olvida.
El sexto paso, es que no debes tomar las cosas que no te pertenecen, recuerda que de acuerdo con las leyes de la naturaleza, mañana te quitarán algo de más valor.
El séptimo paso, es que no debes maltratar a nadie; todos los seres del mundo tenemos derecho a que se nos respete y se nos quiera.
Y por último levántate siempre con una sonrisa en los labios, observa a tu alrededor y descubre en todas las cosas el lado bueno y bonito; piensa en lo afortunado que eres al tener todo lo que tienes, ayuda a los demás, sin pensar que vas a recibir nada a cambio; mira a las personas y descubre en ellas sus cualidades y dales también a ellos el secreto para ser triunfadores y que de esta manera puedan SER FELICES.
Cuento indio.