El hilo conductor del libro es el avance del ser humano a pesar de todas las dificultades. El autor eligió las vidas de unos personajes notables de su época para mostrar su capacidad de iluminar las grandes cualidades como son la tenacidad, la diligencia y la resistencia virtudes, todas ellas, serán las que formaran parte del texto del libro.
El autor cree que la perseverancia y el trabajo incansable son los elementos principales del éxito. ¿De veras lo son? La historia suele traducir los compromisos firmes y el trabajo duro en palabras grandiosas como genio pero sus protagonistas sabían que no era así. Smiles escribió:
«No es tanto un talento excepcional lo que se requiere para asegurar el éxito de cualquier misión, sino más bien un propósito: no solamente el poder de lograrlo, sino la voluntad de trabajar enérgicamente y perseverantemente. Por ello, la fuerza de voluntad se podría definir como el poder más fundamental del carácter de un hombre. En pocas palabras, el hombre entero se define por su voluntad».
La paciencia, el orden mental y la concentración en la tarea presente son elementos clave de todos nuestros grandes avances, en opinión de Smiles, ni la inversión gubernamental ni la educación pueden sustituirlos. Son estas virtudes las que hacen posible el talento. La educación, la riqueza o una familia noble no pueden reemplazar el carácter. Insistía que el carácter es poder y mucho más que la información. El carácter es algo que se forma a pesar de las grandes fuerzas del instinto y del condicionamiento cultural. Piensa que la confianza es el pegamento que mantiene a las sociedades libres y unidas, de ahí que el éxito duradero llegará a los que sean dignos de confianza. El autor no dejó escapar la oportunidad de pregonar la cualidad más valorada: la temperancia. Sobre ella pensaba lo mismo que Sir Walter Scott que dijo: «de todos los vicios, beber es el más incompatible con la grandeza».
Samuel SMILES en «Autoayuda».